Desde siempre han existido dos géneros literarios estrechamente relacionados; lo que convencionalmente llamamos “cuentos” y las “fábulas”.
Los “cuentos” son esencialmente relatos cortos dirigidos al público en general. Ahora ya no pero, desde su origen, los “cuentos” eran “escuelas de vida” y tenían una finalidad ejemplar ya que debían servir de lección sobre lo que “hay” y “no hay” qué hacer.
En lo que entendemos como “cuentos” podemos citar de forma esquemática: Pancha Tantra, Las mil y una noches , Hitopadesha, Calila y Dimna, Sendebar, El conde Lucanor… destacando Charles Perrault en el siglo XVII y los hermanos Grimm y Hans Christiam Andersen en el XIX.
El 28 de octubre de 1696 se obtiene el “Privilegio del rey” que concede permiso para imprimir un libro. En 1697 se confecciona en la imprenta Claude Berbin de Paris, la primera edición de un curioso librito titulado “Historias y Cuentos de antaño. Con moralejas”, su autor es un oscuro funcionario, Charles Perrault.
Este librito, que tuvo un éxito inesperado, contiene diez historias, de las que siete, casi todas atroces, son universalmente conocidas. Transcurridos trescientos años siguen formando parte de la infancia de los niños occidentales.
- La Bella Durmiente del bosque
- Caperucita Roja
- Barba Azul
- El Gato con botas
- Cenicienta o el zapatito de cristal
- Riquete el del copete
- Pulgarcito
En los cuentos encontramos; sexo, violencia, necrofilia, incesto, canibalismo, infanticidio, asesinato, pedofilia…
No te equivoques, el comportamiento actual de los adultos con los niños es reciente. Comenzó a implantarse a partir de mediados del XIX. Desde siempre los niños han sido algo enojoso, molesto. Bocas inútiles que alimentar. Los adultos les golpeaban y los ponían a trabajar lo antes posible. La mitad de los niños morían antes de la adolescencia, los sobrevivientes tenían que afrontar una vida solitaria, pobre, asquerosa, brutal y corta (solitary, poor, nasty, brutish and short) como había indicado Thomas Hobbes a mediados del XVII. Esto era así para la gran mayoría de la población. La vida está llena de peligros y los cuentos sirven a los niños de aviso sobre los riesgos y de advertencia para tratar de evitarlos. Hay que sobrevivir.
Los cuentos han sido objeto de mucha atención, sobre todo desde los campos de la psiquiatría y de la antropología. La bibliografía es muy amplia. Hay dos autores fundamentales. Desde la antropología, Vladimir Propp en “Morfología del cuento” (1928) y sobre todo en “Las raíces históricas del cuento” (1976) en esta, en un proceso laborioso de entomólogo, estudia cientos de cuentos y llega a unas conclusiones que te simplifico:
a).- Los cuentos obedecen a una estructura narrativa cuyos elementos están definidos y numerados en 31 funciones.
b).- Los personajes se corresponden con 7 tipos fundamentales.
c).- El origen de los cuentos está en los ritos y en los mitos ancestrales de los pueblos. Desde la psiquiatría, Bruno Bettelheim en “Psicoanálisis de los cuentos de hadas” (1976) donde reivindica la importancia fundamental de los cuentos en la evolución psicológica de los niños con tres aspectos fundamentales: 1.- La decodificación del lenguaje simbólico. Importancia del valor de los cuentos infantiles respetados en toda su integridad, evitando la edulcoración tipo Disney. 2.- La importancia de los comportamientos que conduzcan a un “final feliz”. 3.- La necesaria calidad que debe tener el relato, que es preferible sea oral a escrito.
Cuando Perrault publicó en 1697 sus cuentos los tituló «Cuentos de antaño«, es decir; del tiempo remoto en que nacieron los cuentos. Europa estaba cubierta de bosques y la población era campesina.
Un bosque cerrado no es una pradera ni una dehesa. Es un lugar inóspito y peligroso, refugio de malhechores y de alimañas. Es un lugar que se cruza con rapidez, únicamente por caminos establecidos y nunca solo.
El lobo es el depredador ancestral. Cruel y astuto. Actúa en manadas. En pleno siglo XVIII aún había lobos en el 80% del territorio de Francia. Te doy otro dato; en una comarca tan “civilizada” como Île de France, los últimos lobos fueron cazados por el Gran Delfín en torno a 1700.
Caperucita Roja es imprudente, no sigue los consejos, la engañan y es devorada por un lobo. Final triste y cruel, pero necesario para que el cuento sea un aviso eficaz.
P.S. Los hermanos Grimm, en su versión de Caperucita Roja dieron un giro a la historia para tener un final feliz. Es algo terrorífico, alucinante… después de devorar a Caperucita, el lobo se duerme. Unos cazadores le rasgan el vientre con unas tijeras y tanto la abuela como Caperucita renacen, salen vivas. Rellenan el estómago del lobo con piedras y lo cosen. Cuando el lobo despierta se nota extraño, comienza a correr y muere a causa de las piedras que lleva en su interior. ¿Cómo te quedas?
Pero aún hay más.
En resumen; Caperucita Roja es una niña imprudente, la engañan y muere en el bosque devorada por un lobo. ¿Eso es todo? No, hay algo más, algo más profundo. Se trata de pederastia, abusos sexuales, muy probablemente violación y todo ello finalizado con asesinato.
La víctima es una niña en la frontera de la pubertad, su Caperucita Roja es claro símbolo de la menarquia, la primera menstruación. El lobo ha devorado a la abuela de inmediato, sin embargo no hace lo mismo con la niña. La espera en la cama y consigue con engaños que se acueste desnuda con él. Cito textualmente el texto de Perrault:
Deja la torta y el tarrito de mantequilla encima del arca y ven a acostarte conmigo… Caperucita Roja se desnudó y fue a meterse en la cama… ¡abuelita qué brazos más grandes tienes! son para abrazarte mejor… el malvado lobo se arrojó sobre Caperucita y se la comió.
Ahora, lee con mucha atención la Moraleja final de Perrault:
MORALEJA: Vemos aquí que las adolescentes // y más las jovencitas // elegantes, bien hechas y bonitas // hacen mal en oir a ciertas gentes // y que no hay que extrañarse de la broma // de que a tantas el lobo se las coma // Digo el lobo, porque estos animales // no todos son iguales // los hay con un caracter excelente // y humor afable, dulce y complaciente // que sin ruido, sin hiel ni irritación // persiguen a las jóvenes doncellas // llegando detrás de ellas // a la casa y hasta la habitación // ¿Quien ignora que lobos tan melosos son los más peligrosos?
Crueldad y violencia sexual en un relato paradójicamente infantil. Caperucita no tiene padre ni hermanos. El único personaje masculino, bajo forma de lobo, es un pederasta violador y asesino. No hay arrepentimiento ni castigo. La Moraleja es un broche final coherente con el relato. Un guiño lleno de cinismo turbio y guasón.
Sinopsis: Los archifamosos cuentos de Perrault, tan conocidos y al mismo tiempo tan mal conocidos, componen un pintoresco volumen con ocho cuentos en prosa y tres en verso, que más de tres siglos después aún conservan una frescura, una gracia y una ironía perdidas con harta frecuencia en la maraña de adaptaciones y falsificaciones sin cuento. Charles Perrault, hombre de mundo, académico y cortesano en la corte de Luis XIV, es -en palabras de Paul Hazard- «fresco y lozano como la aurora; siempre se le descubren nuevos encantos. Como si fuera el que más se divierte y contara esas prodigiosas historias solo para su placer».
Título: | Cuentos de antaño |
Autor: | Charles Perrault |
Editor: | Anaya |
Páginas: | 208 |
Idioma: | Español |
ISBN-13: | 978-8469827475 |
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